martes, 5 de julio de 2011

Capítulo 16

Pero de repente me acordé.

No tengo ropa para irme a la playa. A ver, tengo un par de vestidos monisimos, alguna que otra pamela y un pareo. Pero no tengo ni un solo bikini.

- Creo que no voy a poder ir a la playa – Dije pensando.

- ¿Por qué? ¿Qué ocurre? – Me preguntó extrañado- Pero si te parecía una idea genial.

- Y me sigue pareciendo fabuloso- Respondí- Pero no tengo bikinis.

- ¿Ese era el gran problema?- Dijo riéndose- Pues vamos al centro comercial ahora mismo.
Y así, como si fuera lo más natural del mundo, nos metimos en el coche y fuimos al centro comercial a comprarme un par de bikinis.
Entramos a la tienda y había cientos de bikinis preciosos, si por mí fuera me llevaría toda la tienda en mi maleta.
A sí que decidí empezar a probarme alguno porque en una hora cerrarían la tienda.

El primero que me probé era un bikini azul oscuro con lazos rojos muy favorecedor.
Y el segundo que decidí ver como me quedaba era negro con unas pequeñas flores rosas.

- Bueno- dije saliendo del probador- ¿Cuál me queda mejor?

- Los dos te quedan espectaculares- dijo mi novio.

Nos empezamos a besar por que realmente Dougie no sabía el poder que ejercía sobre mí cuando me decía esas cosas.
Tras un rato besándonos noté una voz que nos hablaba.
Era la dependienta, que nos avisaba de que iban a cerrar la tienda en unos minutos.

A sí que nos dirigimos a pagar los dos bikinis. Cuando salimos de la tienda pensaba que nos íbamos a marchar ya a casa.

- ¿A dónde vas? – Me preguntó mi novio- Ahora nos vamos al cine, y luego a cenar por ahí.

- Ves- dije señalándole- Si es que debo quererte.

Llegamos al cine y elegimos una película cualquiera, por que realmente lo único que queríamos era estar juntos. Entramos en la sala, nos sentamos en nuestras butacas y nos pusimos a hablar.

- Quiero estar siempre a tu lado, ¿vale?- Me dijo románticamente.

- Sabes que yo también- Dije convencida de lo que decía.

- Necesitaba oír eso- dijo cerrando los ojos.

- ¿Acaso lo dudabas?- Le pregunté extrañada- ¿Qué ocurre?

- Nada- me dijo mirándome a los ojos- Solo quiero que recuerdes que te quiero más que a nada.

Le abracé, cerré los ojos y esperé a que terminara la película.

Después de que terminara la película íbamos a ir a comer.

- ¿Dónde quieres que comamos?- Me preguntó intrigado por saber mi respuesta.

- A ningún sitio- Le dije cansada- Vámonos ya a casa, que estoy agotada. Hoy ha sido un día muy largo.
- Como quieras- dijo encogiéndose de hombros.

Nos montamos en el coche y veinte minutos después estaba metida en la cama, con el pijama puesto y abrazada a mi novio.
Pero cuando estaba a punto de dormirme me vino una inspiración.
Me levanté, me puse los zapatos y me fui a componer una canción. La canción que sería el regalo de cumpleaños perfecto.

- ¿A dónde vas?- Preguntó Dougie medio dormido- ¿No es ya un poco tarde para ir a hacer algo? Seguro que puedes hacerlo mañana.

- No- dije- Tú duérmete que yo en un rato vengo.

Bajé corriendo las escaleras y me puse a pensar.

La canción tenía que ser perfecta, y sobre todo, tenía que mostrar todo lo que siento hacia mi novio.
Así que empecé a escribir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario